Siguiendo unos sencillos consejos, podrá superar fácilmente las dificultades que surgen en el proceso de seguir una dieta o cambiar a un régimen de “alimentación saludable”. Léelos, ten paciencia y ¡adelante!
Consejos para reducir el apetito:
- Evite los restaurantes y la comida callejera.
- Lleve consigo comida para picar, como manzanas o nueces.
- No tengas hambre. Cíñete a la rutina: desayuno, merienda, almuerzo, merienda, cena.
- Evite los alimentos envasados listos para comer que contengan glutamato monosódico y otros potenciadores del sabor.
- No coma alimentos con carbohidratos de fácil acceso o exceso de grasa al freír.
- Come lo que es saludable, pero lo que amas. Disfrute del aspecto de la comida.
- Come durante mucho tiempo, alargando el placer. Deja de comer con prisas.
- Crea un ritual alimentario positivo.
- Reemplace los platos y tazas grandes por otros más pequeños.
- Elija alimentos crudos frescos, verdes, coloridos y sabrosos, ricos en vitaminas.
- Dé preferencia a los alimentos recién cocinados con alto contenido de agua y fibra dietética.
- No bebas agua dulce. Evite las calorías “vacías”.
- Beba agua de mesa sin gas.
- Evite las bebidas alcohólicas, ya que el alcohol es muy rico en calorías y también debilita el autocontrol.
- Preste atención a cómo comen las personas delgadas y activas. Sigue su ejemplo.
Atención: No sigas una dieta de adelgazamiento por tu cuenta si tienes diabetes u otras enfermedades crónicas. Es necesario que un médico lo controle, porque por mucho que lo desee, las complicaciones son posibles y, en algunos casos, muy graves.
Consejos que le ayudarán a seguir la dieta:
- No tener hambre: lo mejor es seguir una pauta de cinco comidas (desayuno, merienda, almuerzo, merienda, cena). Mantenga una bolsa de frutas frescas, verduras o frutos secos como refrigerio en invierno.
- Recuerda beber agua Es necesario beber 2 litros al día, especialmente en verano.
- Practica un nuevo estilo de vida activo. Busque la oportunidad de caminar o andar en bicicleta por el parque en lugar de quedarse parado en el tráfico.
- Crea un grupo de apoyo. Encuentre personas con ideas afines, apóyense mutuamente psicológicamente y compartan información sobre estilos de vida saludables.
- Cuida tu estado de ánimo. No te tomes demasiado en serio tu “plan para perder peso para el verano”.
Es mejor buscar algo que te dé confianza y positividad en el día a día.
Perder peso no se trata sólo de comer menos, sino de pensar de una manera nueva.