La producción de carne también es peligrosa para el medio ambiente. Científicos británicos han descubierto que la carne roja tiene un impacto negativo en la salud.
El punto es que su producción es uno de los principales factores del calentamiento global, lo que conduce a la degradación ambiental.
“El sector ganadero representa alrededor del 15% de las emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero (GEI) y también conduce a la deforestación, la degradación de la tierra y la pérdida de biodiversidad. El Comité de Cambio Climático del Reino Unido ha pedido una reducción en el consumo de carne de res, cordero y lácteos para 2050”, dice el comunicado.
Además, el alto consumo de tales productos tiene un impacto negativo en la salud humana.
“Cada vez hay más pruebas de que el alto consumo de carne procesada y, en menor medida, de carne roja, conduce a un mayor riesgo de obesidad, enfermedades cardiovasculares y algunas formas de cáncer. La OMS ha clasificado la carne procesada como cancerígena y la carne roja como probable cancerígeno para los humanos”, añaden los científicos.